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La lecitina de soja es una sustancia natural, extraída del aceite de soja. Los órganos que juegan un papel importante en el metabolismo, como por ejemplo el cerebro, precisan grandes cantidades de lecitina. De un 20 a un 25% de la sustancia seca del cerebro la forman los fosolípidos, que son componentes de la lecitina de soja. Los fosolípidos tienen una importante función en el metabolismo de las células y están inseparablemente ligados a todos los procesos vitales. Sirven principalmente para la transmisión de información entre las células nerviosas y constituyen la base para el funcionamiento normal del sistema nervioso central. Hace mucho tiempo que se conoce la lecitina de soja como alimento para los nervios, pero unas investigaciones internacionales realizadas en los últimos años han demostrado que la lecitina de soja puede aplicarse con éxito en casos de disminución de las facultades mentales.
Los componentes de la lecitina de soja cumplen también con otras funciones del metabolismo. En primer lugar la lecitina de soja toma un buen control del colesterol siendo un enemigo extraordinariamente eficaz de todo tipo de grasa corporal. En efecto, aporta nuevas esperanzas a los que padecen problemas cardíacos, al evitar que el colesterol malo se deposite en el interior de las arterias. Por su acción lipodispersante y emulsionante, hace disolver los ateromas (placas de grasas saturadas, colesterol y calcio) que se precipitan en las paredes arteriales obstruyéndolas. Los fosolípidos mejoran el metabolismo hepático y los valores sanguíneos y por lo tanto contribuyen a la prevención de la arteriosclerosis.
La lecitina de soja es un complejo natural que aumenta la digestibilidad y absorción de las grasas, previene su acumulación en el hígado y contiene agentes que las metaboliza y reduce los problemas relacionados con las malas digestiones al mejorar la absorción de grasas.
Tiene una acción energizante a nivel muscular, mejora el sistema nervioso, incrementa la actividad cerebral y resulta esencial en la estructura de los tejidos nerviosos. En casos de nerviosismo, estados de tensión y cansancio prematuro, la lecitina de soja actúa como reconfortante. Aumenta la capacidad memorística, ayuda en casos de falta de concentración y activa la vitalidad mental.
